Su funcional diseño y la alta calidad de su material las sitúa entre las pinzas elegidas por profesionales y celebrities. Considerada por expertos en belleza como la mejor marca de pinzas para el cuidado facial, Tweezerman transformó la industria del sector a principios de los ochenta. Fueron las primeras pinzas que se lanzaron al mercado (1982) cuyo diseño presentaba puntas perfectamente alineadas. La alta calidad de su material, acero inoxidable, permite tal durabilidad que, usadas adecuadamente, pueden conservarse eternamente.